Según cuenta la leyenda, en lo que actualmente es Gran Bretaña vivía el Rey Uther Pendragon que tenía una larga disputa con el duque de Tintagel. Con motivo de hacer las paces de una vez por todas, Uther invitó al Duque y a su esposa Ingrayne a su castillo. Al ver a la Duquesa, Uther se enamoró perdidamente de ella y se obsesionó a tal punto que pidió a Merlín, el mago de la corte, que la hechizara para hacerla creer que era su esposa. De este amor nació Arturo que fuera entregado a Sir Héctor por Merlín para que lo adoptara como su hijo.
Con el pasar del tiempo, Arturo cumplió los 16 años, y Sir Héctor lo llevó con su propio hijo Sir Kay a Londres, donde muchos caballeros luchaban por liberar una espada de una cárcel de piedra, pero no tenían éxito. Según contaba la leyenda, el que lograra liberar la espada sería el nuevo Rey de toda Bretaña. Cuando Arturo se acercó a esta e intentó liberarla, lo pudo hacer sin ningún esfuerzo, y de inmediato fue declarado Rey.
Mucho después, Arturo reinó acompañado de valerosos caballeros como Perceval, Gawain y Lancelot. Se casó con la hija del Rey Cameliard, Ginebra, quien lo engañó con Lancelot, sin embargo, Arturo tuvo un romance con su hermanastra Morgana que quedó embarazada y nació Mordred. Éste, dejó en evidencia el romance oculto entre Ginebra y Lancelot, noticia ante la cual Arturo no tuvo otra opción que ordenar que ella pereciera en la hoguera como mandaba la Ley, pero, esto no se pudo dar ya que Ginebra fue rescatada por Lancelot quienes huyeron hacia Francia. Arturo muy indignado, salió a perseguirlos dejando su reino al mando de su hijo Mordred.
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| La Leyenda del Rey Arturo |
Cuando Arturo regresó a Camelot, Mordred no le entregó el trono y dijo que luchen para que lo recupere. Arturo y Mordred se enfrentan en una lucha mortal, donde el Padre acaba con su Hijo sin antes éste, lo hiera de muerte.