La leyenda del Murciélago - Oaxaca

Cuenta la leyenda que hace mucho, existió un hermoso Murciélago que era la criatura más bella de la creación. Este, era tal como lo conocemos hoy en día y se llamaba "Biguidibela" (biguidi = mariposa y bela = carne; que significaba algo como "mariposa desnuda").

Un día de terrible frío, el Murciélago subió al cielo y pidió al creador que le de plumas para abrigarse, pero Éste le dijo que ya no tenía más plumas pero podía pedir a otras aves sus mejores plumas. Convencido del permiso, el Murciélago así lo hizo y regresando a la tierra, pidió a cada una de las aves más hermosas, una de sus plumas más hermosas y coloridas.

Tras un largo tiempo recolectando plumas, el Murciélago lucía su hermoso y bello plumaje orgulloso. Él iba por todos lados haciendo gala de su bella imagen e incluso, en una ocasión gracias al eco de su vuelo, provocó un bello arco iris que causaba asombro entre los animales.

Con el pasar del tiempo y los halagos al Murciélago, la soberbia y orgullo se apoderó de él haciendo que mire con desprecio al resto de las aves que él las consideraba corrientes e inferiores. El Murciélago percibía que ninguna ave estaba a su altura, hasta despreció al Colibrí diciendo que era corriente ante él. Su ego hizo que le haga pensar que su aspecto era lo único e importante del mundo. 

Así, las aves y los demás animales fueron despreciados con sus insoportable ofensas, y esto llegó hasta el oído del Creador, quien decidió intervenir llamando al bello Murciélago ante él.

La leyenda del Murcielago mexico

Cuando el Murciélago estuvo en presencia del Creador, éste aleteó con gran alegría ya que se sentía halagado al verse convocado por el ser supremo, sin embargo en medio de su aleteo, poco a poco iba desprendiéndose de su bello plumaje. En cuestión de segundos, el Murciélago estaba desnudo como al principio de los tiempos.

Avergonzado, huyó hacia la tierra escondiéndose en las cuevas y negándose la luz. Durante muchos días llovieron plumas de colores que él no quiso observar tratando de olvidar, lo maravillosamente hermoso que algún día fue. Desde ese momento, el Murciélago vivió en la oscuridad lamentándose su mala actitud.