La leyenda del Huay Chivo

Cuenta la leyenda que hace mucho un viejo hechicero tenía la habilidad de transformarse en un aterrador ser, que era mitad hombre y mitad chivo gracias al poder que obtuvo al vender su alma al Kisín (el diablo).

Se dice que si te cruzas en el mismo camino que el Huay Chivo, no le debes devolver la mirada y sólo sentirás un frío intenso y un mal olor; pero si desgraciadamente lo miras, en cuestión de horas tendrás terribles fiebres y malestares producto de "un mal aire". Parte de esto se transmite por medio de una frase que advierte a aquellos caminantes nocturnos el evitar todo contacto con él, ya que su maldad caerá sobre este.

Aquellos que fueron afectados por él, cuentan terribles experiencias aterradoras y aunque son pocos los que pudieron verlo, no se comprueba a totalidad o se niega su existencia, pero recomiendan prevenirse tal cual dice la frase:

leyenda maya el huay chivo

"Caminante, cuídate cuando andes después de la media noche por aquellos lugares donde anda el Huay Chivo. Este ser oscuro dejará caer toda su maldad sobre ti."

Hay quienes afirman que el Huay Chivo obtuvo dicho poder de transformarse gracias a un rito oscuro, y parte de este ritual, fue el sacrificio de un Chivo y otra serie de procedimientos oscuros. Así, el Huay Chivo nace convirtiéndose en mitad hombre y mitad Chivo, y en esa forma, gusta de ir a asustar y matar animales. Él gusta de alimentarse de las gallinas y de el ganado de los pobladores. Él habita en los lugares más oscuros y recónditos de los bosques y montes.