Cuenta la leyenda de Verónica, que hace mucho en una pijamada, estaba Carolina junto a sus amigas contando historias de terror, y de todas aquellas, contaron la leyenda urbana de Verónica. Ésta leyenda, dice que si uno ve al espejo del baño fijamente y repite "Verónica" siete veces, aparecerá este fantasma e irá por ti.
Las chicas se habían asustado por aquella historia excepto Carolina que, para probar su valor y demostrar que aquella historia no era nada más que un simple relato, se dirigió al baño para recitar siete veces aquel nombre. Todas al saber de esto, decidieron acompañar a Carolina.
Cuando llegaron al baño, Carolina entró sola con una vela encendida en su mano, luego observó fijamente el espejo y repitió siete veces "Verónica". Tras esto no sucedió nada, así que Carolina se encaminó victoriosa a la puerta del baño para regresar, sin embargo, antes de poder tocar el picaporte, la luz de la vela se apagó misteriosamente. Carolina llamó a sus amigas para que abrieran la puerta pensando que era una broma para darle temor. Ella golpeó varias veces la puerta pero por el otro lado, sus amigas solo reían.
Unos segundos después, empezó a oír un sonido como el correr del agua. Al percatarse Carolina, se dio cuenta que el piso se estaba inundando de algo parecido a la Sangre, pero este provenía del grifo. De pronto, del espeso liquido apareció Verónica. Carolina muy aterrada pedía a sus amigas que la dejen salir, pero ellas no le hicieron caso. Su desesperación iba aumentando conforme Verónica se acercaba a ella. Verónica ya muy cerca de ella, sacó algo afilado y acabó con Carolina. Luego, la arrastró hacia el agua del baño y desaparecieron. Las amigas al percatarse que su amiga no salía, abrieron la puerta para ver que sucedía pero, no la encontraron. Muy asustadas y desesperadas, gritaron buscando ayuda.
En la actualidad, aún no se sabe nada de Carolina, ni donde está su cuerpo.